Historia del colegio

La fundadora de las RR Teatinas fue Úrsula Benincasa nació el 21 de octubre de 1550 en Nápoles y falleció en la misma ciudad el 20 de octubre de 1618. Fueron 3 sus “amores”: Jesús crucificado, la Santísima Virgen María y la Eucaristía. Amante de la soledad y el silencio, nunca dejó de recibir a cuantas personas acudían a ella, atraídas por su fama de santidad, para pedirle consejo, oraciones y consuelo ante sus problemas y dificultades.

En 1582 partió para Roma con una embajada divina, después de un serio discernimiento, para comunicar al papa Gregorio XIII un mensaje de renovación de la Iglesia. El Papa encomendó a una comisión de expertos, presidida por San Felipe Neri, la propuesta de Úrsula. Finalizando el proceso con informe favorable, en 1583 le fue concedido a Úrsula el permiso para iniciar una comunidad con varios familiares y algunas jóvenes y recibir a otras jóvenes que desearán adherirse a su proyecto de vida en común. Así surgió el Educandado Teatino, dando lugar a centros escolares, esparcidos actualmente por dos países de África, tres de América y dos de Europa, en Italia y España.

 

La presencia de la congregación en este barrio se remonta al 15 de octubre del año 1944. Aquel día se estableció la primera comunidad de hijas de la Providencia, hoy Teatinas. Las hijas de la Providencia pertenecían a un instituto de derecho diocesano, fundado por la Madre María de la Providencia Escalas y Don Miguel Sureda en 1891 en Felanix(Mallorca). A instancias de la Iglesia aceptaron la fusión con la congregación de las Religiosas Teatinas de la Inmaculada Concepción, Un instituto de derecho pontificio. De aquel origen “providente” viene el nombre del colegio actual.

La comunidad se estableció precisamente en este lugar perteneciente a la entidad de “Regiones devastadas” a petición de la Marquesa de Fontanar, para custodiar una cripta en la que se depositaron los restos de 63 españoles asesinados durante la Guerra Civil de 1937, en el llamado “ túnel de la muerte”, sobre ese lugar se estaba levantando una iglesia y un convento. Al compromiso de esta custodia se unió desde el principio la atención gratuita a la educación de las niñas de la zona.

Desde entonces se han seguido haciendo obras, remodelaciones y ampliaciones para adecuar el Centro a legislación vigente. Lo que comenzó con un pequeño centro unitario es actualmente un edificio de 40 aulas en las que reciben formación chicos y chicas desde Ed. Infantil hasta Bachillerato.

Nueve Religiosas forman la comunidad teatina actualmente, de ellas tres son antiguas alumnas del colegio. Desde los inicios colaboran con la Parroquia ”Cristo Rey” en tareas de catequesis, animación litúrgica y labor asistencial